Ingredientes
- 750 g de calabaza madura
- 125 g de mantequilla
- 150 g de azúcar
- 125 g de harina
- 3 huevos
- 1/2 lata pequeña de leche condensada
- la misma cantidad (media lata) de leche
- ralladura de un limón
- canela (o vainilla, ¿o las dos?)
Hervir la calabaza con un poco de sal, dejar escurrir varias horas (esto no lo entiendo ni sigo muy al pie de la letra) y triturarla. Añadirle la mantequilla, la leche condensada, la leche normal, la ralladura de limón y la canela y triturar hasta que quede bien mezclado todo.
En otro bol, montar las claras a punto de nieve. Cuando estén, añadirle intentando no bajar demasiado las claras, el azúcar y cuando esté bien mezclado todo, las yemas. Una vez hecho esto, añadir la harina y terminar de mezclar.
Mezclar lo de ambos moldes y ponerlo sobre una fuente engrasada con mantequilla. Poner al horno, previamente precalentado, a 150 grados durante 1h (en realidad, hasta que se pueda pinchar con un cuchillo y sacarlo limpio)